Entre los objetivos más importantes de una empresa, debería encontrarse el de diferenciarse de sus competidores; de nada sirve tener un buen producto o servicio, si no se promociona adecuadamente y si no está protegido ante copias de terceros; ser uno más significa resignarse; no luchar por buscar el elemento diferenciador que nos haga destacar  supone estancarse; es no querer avanzar, no potenciar una ventaja competitiva es sencillamente no querer mejorar.

El primer paso debería ser el de ofrecer nuestros servicios o productos bajo un nombre distintivo, único, registrarlo como marca en el ámbito geográfico en el que vendemos y defenderlo para mantener su exclusividad, así no sólo crecerá su valor si no que paralelamente vamos a hacer crecer el valor de nuestra empresa.

En segundo lugar debemos dirigir nuestros esfuerzos hacia el mundo digital; hoy en día twitter, facebook, youtube, instagram, snapchat, whatsApp, etc… las redes sociales en general, constituyen el canal comercial probablemente más importante, pues es la forma más efectiva e impactante de llegar al público en cualquier momento y lugar y sin tener que gastar una fortuna. En un muy buen artículo publicado en EL PAIS, decía Charlotte Gaston-Breton, directora académica del máster de Marketing & Digital Media de la escuela de negocios ESCP europe, que “Gracias al mundo digital las pymes pueden medir sus marcas con las de las multinacionales, pues les permite promocionarse con un coste mucho más bajo, trabajar la comunicación viral y crear contenidos que les acerquen a sus usuarios”.

Tener un producto con la mejor calidad del mercado ayuda a vender, pero no es garantía de que siempre nos vaya a ir bien, es necesario tener algo más; por contra es posible mantener un buen estandard de calidad en nuestro producto o servicio, y tener un éxito mayor gracias a haber focalizado gran parte de nuestros esfuerzos en las redes sociales y a haber protegido nuestro activo.
Un buen ejemplo de caso de éxito, siguiendo este paradigma, lo suponen las gafas de sol HAWKERS, propiedad de una empresa española sita en Elche, que gracias a una buena estrategia de marketing viral en redes sociales, se ha convertido en el sponsor oficial de Los ANGELES LAKERS; obviamente protegieron su marca registrándola  en Estados Unidos y Europa.

El empresario no debería dejar pasar la oportunidad de mejorar el negocio, intentando destacar por encima del resto, centrándose en la protección y promoción digital de sus activos.

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Artículo publicado originalmente en Activos Intangibles.